Por Fernando Pereira
“Tres semanas seguidas
sin quirófano suma el Servicio de Hematología del hospital de
niños J.M. de los Ríos. La sala, dispuesta para tratar a los pacientes con
enfermedades de la sangre, está paralizada desde la segunda semana de 2018 por falta
de aire acondicionado. La mañana de este martes, 30 de
enero, pacientes y padres protestaron en la avenida Vollmer de
Caracas, en San Bernardino, para exigir una solución a las autoridades del
centro pediátrico…
Sin embargo, la ausencia de
quirófano no fue lo único que hizo que las madres y los pacientes salieran a
protestar. Los tratamientos quimioterápicos incompletos y la falta
de reactivos serológicos para analizar las donaciones de sangre se
sumaron a la lista de razones por las cuales protestar”. (Efecto Cocuyo, 30 de
Enero).
La imagen de los niños y sus
padres clamando por su vida y salud en el asfalto genera sentimientos
de solidaridad en la mayoría de la ciudadanía. No falta quienes hacen
prevalecer su posición partidista y sentencian: “Eso es por culpa de las
sanciones impuestas”. “La oposición es la responsable” “A esas familias las
están usando políticamente”.
¿Es una situación reciente?
Cecodap, acompañado de un
grupo de familiares, interpuso el 15 de julio de 2003 una acción de protección
ante la Sala III de Juicio del Tribunal de Protección del Niño y del
Adolescente de la Circunscripción Judicial del Área Metropolitana de Caracas
por los niños y adolescentes con leucemia y otras enfermedades hematológicas
del Hospital J.M. de los Rios, en los términos que plantea la Ley Orgánica
para la Protección del Niño y Adolescente.
El 27 de Abril de 2004, la
Corte Superior del Tribunal de Protección del Niño y del Adolescente dictó
sentencia definitivamente firme que ordenaba a las autoridades de salud: la
gestión y suministro de los medicamentos para la atención oportuna,
eficiente y con la celeridad requerida; suministro de
las terapias coadyuvantes a las complicaciones derivadas de las
quimioterapias; realización de los exámenes especializados requeridos para el
tratamiento de la leucemia y demás enfermedades hematológicas;
trabajos de infraestructura para culminación de remodelación del área
de consulta externa, hospital DIA; dotación de insumos, equipos, entre ellos el
de aire acondicionado para minimizar riesgos de infección y la contratación del
personal requerido.
Se lograron avances durante
que, lamentablemente, no se sostuvieron en el tiempo. En marzo de 2012 la
Jefatura del Servicio de Hematología Pediátrica difundió un diagnóstico que da
cuenta del serio déficit de personal médico, de enfermería, bote
grave de aguas negras, entre otros.
El Servicio “Dr. Walles
Camarillo” fue fundado en 1958 y constituye el más importante centro de
referencia nacional de la hematología pediátrica. El 98% de la población atendida
es del estrato social Graffar V, IV y III (los que más lo necesitan)
El Poder Ciudadano, la
Defensoría del Pueblo y el Ministerio Público, han permitido que no se acate
una sentencia firmesin que se establezcan responsabilidades.
Los familiares han mantenido
una tenaz lucha por el derecho a la salud de sus hijos. Son incontables la
cantidad de promesas y ofrecimientos recibidos que no han sido honrados.
Reiteramos nuestra
solidaridad con los pacientes, con sus familias, con el personal que allí
labora. Su aliento es el nuestro. Cuentan con nuestro apoyo y admiración. El
país no los puede dejar solos.
Foto: Archivo Efecto Cocuyo
01-02-18
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Para comentar usted debe colocar una dirección de correo electrónico