Por Ibis León
Los militares que se alzaron
el 4 de febrero de 1992, encabezados por el teniente coronel Hugo
Chávez, justificaron su sublevación en la incapacidad y corrupción del gobierno
del entonces presidente Carlos Andrés Pérez y en la utilización de la
Fuerza Armada Nacional para reprimir y cumplir tareas ajenas a la institución
castrense.
Sin embargo, a 25 años del
intento de golpe de estado, la Fanb se ha desinstitucionalizado y
los problemas de esa época persisten o se han agravado, en opinión de
la historiadora y analista política Margarita López Maya.
La profesora universitaria
afirma que el 4F “cambió la historia del país” porque marcó la transición de una
democracia “deficitaria” a un régimen antidemocrático, “autoritario
y militarista”.
“El 4F es el
comienzo de una tragedia para Venezuela porque despertó expectativas que
terminaron siendo falsas. Si bien la situación social era crítica y parecía que
la dirigencia política estaba ajena a los problemas de la gente en 1992, la
solución que vino después fue peor que la enfermedad (…) Esos militares que
después tomaron el camino electoral y llegaron por esa vía al poder con la idea
de desplazar a las viejas élites, al final cayeron en las mismas fallas
económicas, exacerbaron el rentismo petrolero y llegaron a unos
niveles de corrupción que no habíamos visto”, opina.
Subraya que, aunque la gente
no apoyó el golpe en la calle, “cuando vio quienes eran los insurgentes,
simpatizó con ellos porque eran jóvenes que no estaban corrompidos por
la política y porque habían logrado sacudir a un sistema político que
parecía ajeno a los problemas de los venezolanos”. Pero las motivaciones de
ese movimiento bolivariano se desviaron en el camino.
¿Cómo evalúa el papel de la
FANB a 25 años del 4F?
“Los militares estaban igual
de descontentos que el resto de la sociedad por la forma en que se venían
desempeñando las élites en el poder antes de 1992.
Se decía que los militares eran
utilizados para tareas indignas. En la época de (Jaime) Lusinchi se
le asignaban gestiones personales como trasladar a las esposas de los líderes
políticos, llevar maletas o ser vigilantes en las fiestas, tareas que
denigraban a la Fuerza Armada Nacional. Ellos veían una vida de lujo y de
corrupción, mientras estaban bajo las órdenes de los mandamases.
Además, dentro del sector
militar siempre hubo aspiraciones de volver al poder y ahí es donde encaja
el Movimiento Bolivariano (que encabezó Chávez). El sector militar
venía de ser hegemónico en la vida política y por eso costó mucho llevarlo a la
vida democrática”.
¿En qué momento se desvió el
proyecto político de Chávez?
“El proyecto se hunde a favor
de un proyecto autoritario cuando Chávez llega fortalecido políticamente
después del golpe de 2002. Sale invicto de esa dificultad, los precios
petroleros comienzan a aumentar y se encuentra con una oposición destruida, ahí
es cuando emerge el proyecto militarista porque ya no tiene contrapeso, no hay contención.
Esto se acentúa con la retirada de los partidos de oposición de
las elecciones parlamentarias en 2005″.
Foto: noticias24
04-02-17
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Para comentar usted debe colocar una dirección de correo electrónico