Odra Campero 23 de agosto de 2016
La
oposición venezolana está por comenzar una etapa extremadamente positiva,
debido a que el gobierno de Nicolás Maduro se encuentra “liquidado” desde el
punto de vista político, y solo le queda el 17% de apoyo de la población, de
acuerdo a la visión del sociólogo y analista político, Carlos Raúl Hernández, “El
único sustento que tiene el gobierno (de Venezuela) es
maniobrar con organismos como el Consejo Nacional Electoral (CNE), el Tribunal
Supremo de Justicia (TSJ) y el apoyo militar (…) Pero el gobierno está políticamente
liquidado”, precisó.
Asimismo,
afirmó que la crisis política, económica y social que atraviesa el país
caribeño, conlleva inexorablemente a la salida del actual gobierno, pero
mediante un proceso de dialogo, el cual a su criterio nunca se ha iniciado.
"Creo que tendría que comenzar una etapa de dialogo, precisamente para
salir del gobierno de Maduro y localizar un gobierno de transición, y así poder
establecer las garantías mínimas que la historia demuestra que son necesarias
para que los gobiernos autoritarios se vayan".
"Maduro
no ha terminado de irse, precisamente porque hay mucha resistencia al diálogo,
al entendimiento y a darle un conjunto de garantías a algunos factores del otro
sector de que no habrá terrorismo judicial, ni persecuciones en las calles”,
agregó.
Hernández,
quien sigue muy de cerca el acontecer político y social venezolano, considera
que la oposición debe ir a ese posible diálogo con la menor cantidad de
condiciones posibles para que se pueda dar. “A los diálogos no se puede ir con
demasiadas condiciones, porque son excusas para que no se dé”.
En ese
sentido, explicó que el camino del referendo revocatorio no es el más
conveniente para lograr salir de la crisis, en su lugar considera que se debió
seguir el cronograma electoral y realizar las elecciones regionales que estaban
pautadas para noviembre de 2016.
“Para
mí se hubiera planteado ir a las elecciones de gobernadores y ganar todas (esas
instancias), eso hubiera dejado al gobierno sin punto de apoyo, hubiera sido el
referendo revocatorio verdadero, al que el gobierno le hubiera sido mucho más
difícil impedir”, puntualizó el analista.
Un
acuerdo para la salida
En
cuanto a las recientes declaraciones ofrecidas por la presidenta del Poder
Electoral, Tibisay Lucena, las cuales dejaron entrever el peor de los
escenarios, que este año no habrá ni revocatorio, ni elecciones de
gobernadores, Hernández sostiene que se debe llegar a un acuerdo entre las
partes.
“Frente
a ese cuadro tan negativo, yo creo que hay que recuperar la visión de
posibilidades y ser optimista, es decir, hacer todo lo necesario (…) para
lograr la salida del gobierno de Maduro, porque el objetivo no es el
revocatorio es que Maduro se vaya, y lo puede hacer por cualquier vía una vez
que haya un acuerdo político entre los factores y que tenga el beneplácito de
los militares, que se han convertido en un elemento político”, sentenció.
Finalmente,
resaltó que la propuesta del gobierno de Venezuela, en la cual se plantea que
el referendo revocatorio podría ser el año que viene, es un punto para iniciar
el dialogo, y llegar a un acuerdo.
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