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sábado, 20 de agosto de 2016

Rafael Simón Jiménez:Villalba Y Betancourt construyeron las bases de la democracia, por @manuelfsierra



Manuel Felipe Sierra 20 de agosto de 2016

Pertenece a una familia con tradición en las luchas políticas. Fue destacado dirigente estudiantil en Barinas, su ciudad natal.  Forma parte de los fundadores  Movimiento Al Socialismo (MAS). Diputado, ex vicepresidente de la Asamblea Nacional en el año 2002, profesor universitario y estudioso de la historia venezolana sobre la cual ha escrito varios textos,  ahora ofrece un importante documento sobre las vidas  e influencias políticas de Villalba y Betancourt en el acontecer venezolana del siglo XX.

¿Por qué te llamó la atención contraponer estas dos figuras que han sido tan polémicas y que ambas llenan la historia de Venezuela desde el 28 hasta los años sesenta?


Estas son como el paradigma de las dos maneras de concebir la política. Betancourt y Villalba, se estrenan en 1928 en la Semana del Estudiante, Villalba es sin duda el líder de esa oportunidad con su discurso en el Panteón Nacional, después le toca a Betancourt hacerlo en el Teatro Rivoli. Pero evidentemente que la gran figura era Villalba, ambos comparten prisión en el Cuartel El Cuño y luego en el Castillo de Puerto Cabello y de allí salen bajo una amnistía quepor la presión de los estudiantes tuvo que decretar Gómez.  Se involucran en lo que fue la rebelión militar del 7 de abril de 1928, y a partir de allí  corren suertes disimiles.

 Jóvito es hecho preso y Betancourt se va a la clandestinidad
Si, Jóvito es  capturado por la policía del régimen y va a pasar los próximos siete años hasta 1934 en las ergástulas de la dictadura; de nuevo en el Castillo con grillos de sesenta libras y Betancourt logra huir del país, sale a Curazao y comienza un itinerario que va a ser clave en su formación y en su percepción del ejercicio de la política. Allí hay una primera bifurcación que va dando dos paradigmas de liderazgo porque Villalba, por supuesto, sometido al rigor carcelario es un hombre que vive un poco de las glorias del pasado, se colaba por los intersticios alguna información, los propios presos como Pio Tamayo que era un veterano de las cárceles venezolanas y Alberto Ravel hacían intercambio de opiniones pero no tenían la conexión con un mundo que avanzaba a zancadas.  En cambio Betancourt logra huir a Curazao luego pasa a Barranquilla y posteriormente se establece durante un tiempo en Costa Rica y además viaja a los países americanos, y allí comienza a adquirir una dimensión del conocimiento. De esta manera Betancourt se hace marxista, tiene la primera percepción de algo que será clave en su pensamiento político que es la interpretación del petróleo en la vida venezolana. Entonces cuando ambos  se  encuentran en Caracas en el 36 luego de la muerte de Gómez por supuesto que coinciden y por supuesto que Jóvito de nuevo va a ser la figura estelar, y es quizás es el mejor orador que ha tenido Venezuela en toda su historia pero ya allí, a pesar de que actúan juntos en el PDN ya  se aprecian en ambos las grandes diferencias.

LA LUCHA

En aquel momento la oratoria era un instrumento fundamental de la política
Por supuesto, Jóvito sigue siendo un político que fundamenta su acción en una relación directa con las masas a través de su verbo y a través de la movilización de calle. Betancourt no,  él  viene muy claro del exilio en que el instrumento fundamental para la transformación y para la acción política tiene que ser la construcción de un partido, de una organización dotada de estructura y  programa.

¿Ya había dado paso por eso en Costa Rica?
Mucho, ya militaba en el Partido Comunista de Costa Rica y había sido incluso director de su periódico, y había trabajado en todo lo que fue el “Plan de Barranquilla”.

¿Y  fundador del Grupo ARDI?
Si pero primero fue el PRV donde milita con Gustavo Machado y con Carlos León que dirigían el partido desde México pero fue una incursión muy breve: ARDI fue luego del Partido Comunista costarricense, es decir ya viene con una visión muy clara de lo que hay que hacer una vez muerto Gómez o derrocada la tiranía y entonces comienzan vidas paralelas; desde muy pronto van a surgir diferencias y antagonismos porque Jóvito insistirá en hacer la política entorno a su figura que es una figura nimbada, de una leyenda, de un hombre que había acumulado todas las glorias del 28 y todas las glorias de siete años preso con grillos en las cárceles del gomecismo; y Betancourt va a perseverar en la construcción de un país y por supuesto viene la división definitiva entre ambos 1937 cuando hay el decreto de expulsión de López Contreras que los incluye a los dos

Se repite la historia, Jóvito vuelve al exilio y Betancourt a la lucha clandestina.
Si de nuevo Jóvito va al exilio y Betancourt se queda clandestino en el país, terminando de construir ese partido político que según él iba a marcar historia y a partir de allí si hay un desencuentro casi permanente porque Betancourt construye en la clandestinidad todo lo que fue la organización primigenia de lo que más tarde se llamaría Acción Democrática, y Jóvito se dedica a tratar de terminar sus estudios porque era un hombre además muy talentoso y particularmente bien formado en los temas de derecho constitucional, y  luego se convertirá en un académico, en un catedrático en esa materia. Cuando se reencuentran en el año cuarenta que Betancourt regresa luego de pagar un año de exilio en Chile  ya sus destinos son claros de bifurcación de estructura de la política. Villalba aprovechará su gran influencia, su prestigio para ser electo en las fórmulas de elección indirecta que todavía se practicaban durante el medinismo como senador al Congreso Nacional y allí va a volver a ser un hombre brillante que asumirá los temas más importantes de la modernización política en Venezuela: el voto femenino, la compatibilidad de las funciones legislativas y ejecutivas, el voto universal directo y secreto, es decir Villalba va a ser el gran orador democrático en un Congreso medinista donde todavía habían figuras incluso representantes del gomecismo.

EL LIDERAZGO

Y Betancourt por supuesto a darle forma de lo que sería Acción Democrática
Es así, Betancourt en el año 41 al amparo de las libertades de un régimen liberal como el que encabezo Medina Angarita va a constituir Acción Democrática el 13 de septiembre de ese año y a perseverar en una oposición muy consecuente y muy a fondo al gobierno. En 1945 viene lo que va a ser una ruptura que marcará pauta en el resto del siglo XX yo creo que con proyecciones hasta ahora, que fue el golpe de Estado del 18 de octubre de 1945 y con ese hecho se va hacer más patética  la ruptura entre Betancourt y Villalba. Es tal la ruptura que incluso Villalba se involucra en una conspiración contra la Junta Revolucionara de Gobierno y Betancourt lo tiene que poner preso, es decir, los grandes amigos que han cumplido 20 años de edad juntos en el Cuartel del Cuño y compartiendo grillos ahora uno es preso del otro y de allí se va a abrir una espita que va a conducir por supuesto al 24 de noviembre 1948 con el derrocamiento de Gallegos y la instauración de una dictadura militar.

En esta secuencia hay un dato importante que es el año 52.
Claro, cuando Villalba vuelve a ser la gran figura estelar, porque se convierte en medio de las más adversas condiciones en la gran referencia democrática en las elecciones para la Constituyente convocada por la Junta Miliar y en la cual su partido URD obtiene una clara victoria que es desconocida por el gobierno mediante el fraude y que abre paso a la dictadura  de Pérez Jiménez.

Por cierto que para esas elecciones Betancourt llamó a la abstención.
Sí, porque consideraba que era una mascarada, tal como resultó al final con el golpe militar que desconoció la voluntad popular pero Jóvito también tuvo razón porque durante esa campaña pudo fortalecer el músculo  democrático de ese país que habría de ser indispensable cinco años después para el derrocamiento de la dictadura.

Ya en 1957 el encuentro entre Betancourt y Villalba en Nueva York abre la conciliación entre los dos líderes y de allí surge la fundación de la Junta Patriótica en la lucha contra la dictadura y luego el Pacto de Puntofijo, pero ya con la presencia también de Rafael Caldera como líder de Copei
Si, es cierto entre Villalba y Betancourt  se abrió evidentemente una rivalidad que no lograron resolverla a lo largo de cincuenta años, a pesar de la amistad, a pesar de la convivencia y a pesar de ello también compartirían algunos capítulos como el “Pacto de Puntofijo” y los acuerdos de Nueva York y la Junta Patriótica y todos los movimientos que van a dar al traste con la dictadura de Pérez Jiménez.

Has escrito un libro que por supuesto recoge muchos episodios de las trayectoria de Villalba y Betancourt a lo largo de los años de la democracia hasta 1981 cuando muere Betancourt en Nueva York y luego la actuación de Villalba ya al final de su vida. Sin duda es un  texto que será de mucha utilidad para la dirigencia política joven del país de hoy en día.
Si vale, yo creo que la primera lección fue el papel que jugó la Generación del 28 en la historia de Venezuela, esa generación fue la más trascendente que ha tenido el país después de la generación de los padres fundadores, no hubo otra que marcara un antes y un después. Ese grupo de jóvenes que se habían formado la mayoría de ellos nacidos entre 1906 y 1908 que por cierto Villalba y Betancourt se llevaban un mes ambos nacidos en 1908 uno en Guatire y otro en La Asunción, bueno ese grupo de jóvenes  que se habían criado en medio del terror de las dictaduras de Castro y de Juan Vicente Gómez en un periodo oscurantista donde la dictadura estaba aislada del mundo y donde cualquier material de cualquier lectura era satanizada y perseguida cómo aquellos jóvenes pudieron colectivamente en los actos de la Semana del Estudiante en febrero de 1928 abrirle al país el camino entonces remoto y difícil de la democracia y el progreso.

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